¡Te quiero cosa con ojos!

Tengo que reconocer a estas alturas, que probablemente llevemos cerca de medio año sin mantener una conversación con más de cinco frases seguidas. Supongamos que es porque nosotros lo hemos querido y no el destino. Supongamos también, que nos esperan tiempos mejores y que lo prometido es deuda. Creamos, que lo podemos arreglar, que nos seguimos queriendo y que todo sigue igual, que no ha pasado nada. Como si fuese el primer día. Como si me acabases de conocer.
Puede que nuestra amistad no sea la mejor, ni tampoco nosotros. Puede que por cada sueño, tenemos mil enfados. Puede también, que nos dejemos, nos distanciemos y pongamos un "pause" entre nosotros. Puede que lo que en realidad nos une, son todas esas pequeñas tonterías que tenemos en común, que al fin y al cabo, acaban siendo grandes. Pueden ser muchas cosas, tantas, que jamás acabaría de contarlas...
Pero ¿sabes? Puede que ya te lo haya dicho antes, pero te quiero, te quiero y punto. ¿Sabes porqué? Porque eres esencial, y es así y no hay más. Tú con todos tus defectos y todas tus virtudes. Tú llorando y tú sonriendo. Tú callado y tú gritando. Tú, sin más.
Porque estoy dispuesta a soportar todo lo que conlleva quererte si puedo seguir contando contigo.