lunes, 27 de febrero de 2012

Mientras los gatos duermen.

Moriré aquí, cada centímetro de mí perecerá. 
Cada centímetro, salvo uno. 
Un centímetro, algo pequeño y frágil. 

Y lo único que merece la pena conservar en el mundo. 
Nunca debemos perderlo o entregarlo. 
Nunca debemos dejar que nos lo arrebaten. 
Espero, seas quién seas, que escapes de este lugar. 
Espero que el mundo cambie y que las cosas mejoren. 
Pero lo que espero por encima de todo
es que entiendas lo que quiero decir cuando te digo
 que aunque no te conozca y aunque puede que 
nunca llegue a verte, 
a reírme contigo, a llorar contigo o a besarte... 
te quiero, con todo mi corazón. Te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario